El espacio es pequeño, como mucho cuatro mesas, atendidas de forma muy profesional y rápida. De primero me decidí por unas lentejas. Ya sabéis; en verano hay que seguir comiendo legumbres!. Eso que se observa en la foto superior es la "ración" para una persona... y lo del medio es un cucharón!. Sin comentarios, os dejo el pan; normal, normal, normal...
De segundo me recomendaron unas costillas de cerdo guisadas, y ya sabéis; no se decir no a las recomendaciones de las personas que nos atienden en los bares y restaurantes. La foto no es buena
Gran ración, aunque creo que le sobraban las patatas. La salsa era correcta y las costillas estaban muy, muy hechas, la carne blandita, blandita. ¿Y de postre?
Pues de postre un pedazo de flan casero, que fue la ración más pequeña de comida en la pitanza. Vamos con el resumen:
Lo mejor
- Se aparca muy bien
- La atención es esmerada, correcta, educada y recomiendan cosas que luego están buenas
- Relación calidad-precio excelente
Lo Malo
- Bar pequeñito, pequeñito....
Nos vemos en un próximo post.
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